Las fortalezas no son ventajas competitivas

Publicitamos las fortalezas como si fueran razones de preferencia para el mercado. Los argumentos que estamos dando a los clientes para justificarles por qué deberían comprarnos, son los mismos que dice la competencia y los mismos que los clientes están hasta la saciedad de escuchar. Las fortalezas son requisitos mínimos para competir, no diferenciales.