Las garantías son una alternativa de diferenciación, tanto en productos como en servicios. No solamente reducen el riesgo de compra; también generan confianza.
Garantías hay de todos los tipos, colores y sabores. Desde aquellas que demuestran la calidad del producto (como el ladrillo con garantía de 100 años), hasta las que sorprenden con su servicio de satisfacción total (tiene un año para devolver los zapatos).
En este caso, una escuela de esquí para niños (donde los resultados deben verse de manera inmediata en unas súper cortas vacaciones familiares), está tan segura de los resultados que logra, que lo plasma en su garantía:
“GARANTIZAMOS QUE SUS HIJOS APRENDERÁN A ESQUIAR
KIDS SKI SCHOOL
En el tercer día de clases, los niños de 5-6 años ya esquiarán por Haymeadow Park, y los de 7-14 se graduarán en Red Buffalo Park*. Inscriba ya a sus niños en Beaver Creek Ski School.
*Si esto no se logra, su cuarto día de clases es gratis.
Agende una clase hoy • BeaverCreek.com“
Es el principio de las garantías: generar confianza y demostrar que sabe de lo que está hablando.
