54 cosas que le diría a mi yo de 38 años sobre emprendimiento

54 cosas que le diría a mi yo de 38 años sobre emprendimiento
54 cosas que le diría a mi yo de 38 años sobre emprendimiento

Para conmemorar mi onomástico 54 (el 25 de diciembre), reflexioné sobre lo que han significado  mis casi 16 años como empresario, con los errores y los aciertos; y los he plasmado en estas 54 lecciones que le diría a mi yo de 38 años, que fue la edad en la que empecé con Bien Pensado (después de quince años en el mundo corporativo).

Mentalidad y actitud

  1. El éxito tarda más de lo que crees; sé paciente.
  2. El fracaso no es el opuesto del éxito; es parte del proceso.
  3. La confianza viene de hacer, no solo de planear.
  4. Enfócate en el progreso, no en la perfección.
  5. Aprende a adaptarte rápido; lo que funciona hoy, puede no funcionar mañana.
  6. No tengas miedo de soñar en grande. Eres más capaz de lo que crees.
  7. Sé resiliente; es tu mayor activo frente a las adversidades.
  8. Confía en tu instinto y guiate por los datos.
  9. Aprende a decir “no” para proteger tu tiempo y energía.
  10. Celebra las pequeñas victorias; te llevarán a las grandes.

Aprendizaje y habilidades

  1. Nunca dejes de aprender; lee, escucha y no temas preguntar.
  2. Invierte en tus habilidades de comunicación; valen más de lo que imaginas.
  3. Domina el arte de contar historias; es tu arma secreta en ventas.
  4. Aprende a manejar tus finanzas; te evitará mucho estrés (y carencias).
  5. Busca mentores que estén donde tú quieres estar.
  6. Estudia el arte de la negociación; te será infinitamente útil.
  7. Oblígate a delegar; no hay otra forma de crecer.
  8. Enfócate en resolver problemas a los clientes, no en vender productos.
  9. Entiende el comportamiento humano; es la clave de la interacción.
  10. Apasiónate por la tecnología; te facilitará la vida.

Relaciones y networking

  1. Son relaciones, no transacciones.
  2. Rodéate de personas que quieren verte triunfar.
  3. Construye una red de contactos antes de necesitarla.
  4. Sé auténtico; no hay nada más atractivo.
  5. Nunca quemes puentes; el mundo da muchas vueltas.
  6. Escucha más de lo que hablas; así aprenderás lo que la gente necesita.
  7. Sé generoso con tu conocimiento; el universo es circular.
  8. Siempre pide retroalimentación; así mejorarás.
  9. Escoge a tus aliados con cuidado; los valores son la esencia.
  10. Nunca subestimes el poder de una nota de agradecimiento escrita a mano.

Experiencia del cliente

  1. Los clientes no compran productos; compran experiencias.
  2. Busca superar expectativas, no solo en cumplirlas.
  3. Sé honesto con tus clientes; valoran la transparencia más que la perfección.
  4. Recuerda que tu mejor marketing proviene de clientes felices.
  5. Escucha las quejas (y haz algo al respecto); son oportunidades para mejorar.
  6. Personaliza tu servicio; eso es lo que te hace memorable.
  7. Los pequeños detalles pesan mucho más de lo que crees.
  8. Siempre cumple tus promesas; la confianza lo es todo.
  9. Responde rápido a los problemas; demuestra que te importa.
  10. Trata a cada cliente como si fuera el más importante.

Estrategia de negocio

  1. No busques atraer clientes por precio; terminarás con los incorrectos.
  2. Enfócate en diferenciarte; hay demasiada gente prometiendo lo mismo.
  3. No persigas todas las oportunidades; foco, foco, foco.
  4. Recuerda: Ventas es vanidad, utilidad es sanidad, caja es realidad.
  5. Prueba ideas rápido antes de lanzarte al agua por completo.
  6. Sé cristalinamente claro con tu propuesta de valor; ¿por qué deberían elegirte?
  7. Ten presente a tu competencia, pero no te obsesiones con ella.
  8. Construye una marca, no solo un negocio; la reputación lo es todo.
  9. Aprende cuándo pivotar y cuándo perseverar.
  10. No quieras agradarle a todos; no todos son clientes potenciales.

Vida y balance en el trabajo

  1. Tu salud importa más que tu negocio; cuídala.
  2. Ser emprendedor es una filosofía, no una moda.
  3. Dedica tiempo a tus seres queridos; son tu razón de ser.
  4. El éxito no se trata solo de dinero; se trata de libertad, impacto y significancia.

Alinearnos con lo que tiene sentido en nuestras vidas es la mayor realización. Forjar nuestro propio camino es desafiante, pero también, infinitamente satisfactorio. Y lo resumiría en el poema No hay mejor forma de ganarse la vida, el cual escribí al final del libro Negocios Inmortales, publicado en 2020.