Hibridación, una palabra que define la mezcla de dos o más elementos de diferente naturaleza o tipo. Lo hemos relacionado por ejemplo con la biología, la industria automotriz y con la tecnología, pero en los últimos años se ha incorporado al lenguaje empresarial para evidenciar cómo en el nuevo entorno competitivo, las organizaciones requieren hibridar sus talentos en función del tan anhelado desarrollo y crecimiento.
Es ahí donde el término adquiere valor; en las empresas, donde se vuelve eje fundamental de la gestión del recurso humano. Hoy vemos como muchas empresas buscan crear equipos multidisciplinarios, como una forma de enriquecer los procesos de innovación, mercadeo o ventas, entendiendo que la visión conjunta es definitivamente más poderosa que una visión jerárquica o aislada. Esta hibridación de conocimientos y habilidades ayudan a romper el sesgo cognitivo de la “fijación funcional”, que impide ver usos alternativos a un producto o tecnología más allá de su función original.
En muchas ocasiones se debe pensar fuera de la caja a la hora de desarrollar nuevos productos, porque los tecnólogos, ingenieros, diseñadores y directivos parten de su propia experiencia y prejuicios, a menudo sesgando, y volviendo lentos los procesos de innovación así como restando competitividad a la empresa.
Cada vez más, las empresas migran al modelo que propone “hibridar talentos”, siendo una oportunidad de transformar procesos e involucrar la perspectiva de todos para encontrar la “mejor manera de hacer las cosas”. Entonces, es responsabilidad de las organizaciones tener la capacidad de conjugar, mezclar y fusionar talentos (aún por muy distantes que puedan ser los de un ingeniero a los de un financiero o los de un diseñador), dejando que cada uno aporte su experiencia, opiniones y soluciones frente a un reto o una dificultad.
Las siguientes son algunas claves para tener éxito en el modelo de mezclar talentos.
- Entender cada talento, cada individuo: Cada quien tiene su visión a situaciones o retos similares. Nada se debe imponer o forzar. El mejor aporte proviene de la creatividad libre.
- Gestionar, atraer, conquistar: El estilo de dirección de la empresa logra enganchar a los talentos, motivarlos con beneficios, reconocimientos o entrenamientos para que se mantengan, y los conquista con un entorno organizacional que valore sus ideas, para que su talento funcione al 100%.
- Tareas claras: Cuando se tiene claridad acerca del objetivo, cualquiera pueda superar una situación. Este punto es clave, y proviene de la dirección, de su nivel de compromiso con los talentos que le rodean.
- Sentirse parte de un proyecto común: Las empresas crecen por las acciones conjuntas de las personas, no por los esfuerzos individuales. La hibridación de talentos promulga precisamente eso: “lo resolvemos”, “lo logramos”.
- Encontrar la pasión: El 90% de las cosas se consiguen con el poderoso efecto de la pasión, brinda determinación y brinda significado al por qué y para qué se hace algo. La hibridación de talentos, da cabida a las pasiones individuales.
Estos puntos fundamentales pueden catapultar el modelo de “hibridación de talentos” dentro de la organización, pero en definitiva el éxito recae sobre la gestión del recurso humano; de su capacidad de hilar pensamientos, habilidades y experiencias, entendiendo que empresas exitosas reinventan su futuro gracias al talento de las personas.
Acerca de Juan Pablo Arango (@JuanPaEvolution)
Profesional y aspirante a Máster en Mercadeo y Dirección comercial de la Universidad de Barcelona, con amplia experiencia en la investigación de mercados. Disfruto leyendo, viendo, escuchando y escribiendo acerca de temas de mercadeo, innovación y emprendimiento. La frase que me describe es #SharingKnowledge, conocimiento colaborativo.