Si queremos realmente conseguir resultados sorprendentes, hay que dejar la actitud de víctima y convertirse en protagonista. Con frecuencia escucho vendedores que me dicen: es que mi jefe no aprueba, es que el cliente sólo compra por precio, es que las políticas de la compañía, es que el sistema de información, es que los de finanzas no aprueban, es que los de mercadeo no nos dan promociones, es que los de despacho, es que los de producción, es que, es que, es que… Que la inflación, que la devaluación, la revaluación, que el invierno, que el verano, que la tasa de cambio, que los competidores…
¿En serio?, ¿todavía estamos con eso?, ¿todavía estamos pretendiendo que son los demás, los que tienen el poder de que no cumplamos las metas en ventas?, ¿todavía estamos creyendo que es la competencia la que hace que no cumplamos nuestras ventas?, ¿todavía creemos que es el precio o el producto de la competencia? No, es la actitud que tomamos frente a las cartas que tenemos. Es en gran medida parte de lo que hace que en muchos casos el vendedor simplemente se justifique por condiciones externas, que son absolutamente incontrolables, que por supuesto es parte de la dinámica de los mercados, pero son las reglas del juego a las que todos nos enfrentamos.
No podemos seguir echándole la culpa a los demás, a otras áreas, a los clientes, al clima, a las condiciones económicas o a una nueva ley. Los demás no son los responsables de nuestro destino, uno es responsable de su propio destino. Uno no puede esperar a que le pasen las cosas, uno tiene que hacer que las cosas pasen; y esa es la diferencia entre un vendedor exitoso, una persona segura de la que vende, segura de sí misma y una persona que simplemente es víctima, o se hace la victima, de todo lo que sucede.
Usted decide cuál es la posición que va a tomar y qué actitud que va a tener. Lo que no podemos cambiar ahí estará, pero enfoquémonos y gastémonos la energía en aquello que sí podemos cambiar, en aquello que sí podemos trabajar, en aquello que si podemos mejorar. Está en nosotros, no en el jefe, ni en la compañía, ni en los presupuestos, ni en los recursos, ni en los clientes, ni en la competencia. Está en usted y en cada uno de nosotros el que logremos hacer la diferencia.
La voluntad es la esencia de todo y de allí parte todo. Si uno no quiere movilizarse, nada le va a funcionar. Algunas veces me preguntan, por ejemplo un consultor de mercadeo, “¿Cómo hago para convencer a un cliente de que el mercadeo es importante?”. Y le contesto, “¿Convencer a un cliente?” Yo no convenzo a un cliente, yo no trabajo con clientes que tenga que convencer de que hacer marketing es importante. Yo trabajo con clientes que son conscientes de que hacer marketing es importante y les ayudo a eso, que es diferente. Cuando no se tiene la disposición o la actitud, va a ser mucho más difícil. Un profesor alguna vez me preguntaba junto a sus alumnos, una vez que dictaba una charla en una prestigiosa universidad: “David, cómo hago para que estos muchachos sean más conscientes de lo que estamos trabajando, le tomen amor a los temas que estamos viendo?”. Mi respuesta fue: “Profesor, eso no es un problema suyo, por supuesto usted pone las herramientas y la plataforma, pero la actitud está en cada uno de ellos. Si los alumnos quieren ir a la universidad a chatear, arreglarse la cresta del pelo y a tener otras conversaciones, es problema de ellos y por supuesto se verá en las notas, pero la responsabilidad es de ellos no suya”.
Uno a veces cree que es responsable por el comportamiento de los demás. No hay una expectativa más utópica que pretender cambiar a los demás. Y pasa en todo, pasa a veces en la pareja, que uno cree que puede cambiar a la señora o la señora lo va a cambiar a uno, y no es eso. Cada uno tiene su realidad y cada uno puede hacer una realidad diferente. Pero es entender que cada uno asume su propia ºresponsabilidad.
Anthony de Mello, un sacerdote Jesuita de la India que murió hace unos años tenía una frase que suena un poco dura, pero captura la esencia del mensaje y es: “No intentes enseñar a cantar a un cerdo, porque pierdes tu tiempo y el cerdo se enoja”. Si no hay voluntad, no hay absolutamente nada, si no hay responsabilidad, es muy difícil.
No podemos seguir esperando a que las cosas pasen, hay que hacer que las cosas pasen, hay que hacer que llueva, hay que hacer que las cosas sucedan y no quedarnos simplemente siendo víctimas de lo que nos pasa.
Si esta es la posición, mejor ni esté en ventas, dedíquese a otra cosa, al mundo contemplativo; porque la vida es esa, llena de eventualidades, de circunstancias que nos dificultan las cosas. Si fuera fácil cualquiera lo haría. Para eso no necesitamos personas que saquen adelante las cosas, pero es irracional pensar en crear una realidad diferente si no hace nada diferente, si no se esfuerza por eso. “Que no tengo plata, que no tengo capacitación, que no esto y lo otro”. Por amor a Dios, no puede ser.
Seamos responsables de nuestra propia vida, de nuestro propio destino y de nuestra propia carrera comercial. Así que la invitación de hoy es a salir y hacer la diferencia, no quedarnos quietos esperando a que las cosas lleguen. Es salir y hacer que las cosas lleguen, hacer que los clientes sigan con nosotros, no aceptar un no como respuesta y continuar cada día buscando mejores maneras de diferenciarnos. Es dejar el mundo un poco mejor. El resto se quedarán esperando que las cosas pasen, pero usted salga y haga la diferencia. El mundo lo necesita.
Como siempre no solo una nota de interes sino que va mas alla, aporta
positivismo, ansias de lograr lo que nos proponemos, y comos si fuera
poco actualizada. Gracias.
Me alegra mucho Ana. Siempre hay grandes oportunidades, sólo que nos cuesta verlas. Seguimos en contacto!
Esta bien planteado y no hay dudas sobre el hecho de que la actitud marca la diferencia, sin embargo hay una “contra-mirada” desde el lado empresarial que no se puede desestimar y es el hecho de que esas excusas de la fuerza de ventas seguirán apareciendo como hasta ahora por lo cual es necesario que el equipo comercial, ese que está de cara al cliente, esté más que cualquier área de la organización en permanente formación. La idea es ofrecer herramientas y actualizaciones que le permitan a ese vendedor “reducir su nivel de excusas”. Esa mirada preventiva deberá ser una acción constante de los lideres de la compañía.
Así es Manuel Felipe, siempre existirán contingencias y objeciones en los que es necesario entrenarse y prepararse para tratar de la manera correcta. Cuando los argumentos son sólidos, la seguridad de la fuerza comercial es mayor.
como usted dice es fuerte pero verídico ya que siempre buscamos culpables y no soluciones, siempre esperamos nunca queremos ir a buscar
muchas gracias por estos aporte que proporciona
Hola David, creo que es parte de la naturaleza humana. Tendemos más a ver lo negativo que lo positivo. Hace parte del instinto de conservación que traemos en el ADN, pero igualmente creo que podemos irlo cambiando hacia una mejor realidad. Saludos!
David, muy acertada tu apreciación, lo he comprobado personalmente, en alguna etapa de mi vida solía culpar a otros por mis resultados cuando realmente todo dependía de mi.
En ventas suele pasar continuamentej, un dia estamos motivados y al siguiente frustrados, no sabemos asumir las dificultades ni los retos, es la voluntad y la buena disposición lo que nos permite alcanzar metas. Este mensaje es oportuno para este preciso momento. Gracias
Efectivamente Ariadna la gestión comercial tiene altibajos, por lo que creo que con mayor razón deben estar muy sólidos y seguros de lo que hacemos, vendemos y cómo ayudamos a los demás con lo que vendemos. De lo contrario, los rechazos y las objeciones nos golpean más duro. Como bien dices, está en cada uno el saber que los resultados dependen de nosotros.
Excelente video,es motivacional y bien explicado el punto, realmente es el principio 90/10 dice que:
El 10% de la vida está relacionado con lo que te pasa.
El restante 90% está determinado por la forma en que reaccionas a eso que te pasa.
Muchas gracias por este video.
Así es Alberto, buena analogía del 90/10. Creo que a veces permitimos que ese 10 gobierne las acciones, cuando en realidad tenemos un 90 para transformar. Gracias por el comentario!
El mejor articulo que he leído de motivación a la fuerza de ventas. Gracias por esas palabras muy acertadas sin más ni menos.
Me alegra mucho Viviana, espero sea de utilidad para todo el equipo!
muy acertado el articulo, nos pone en la realidad del día día de nuestras organizaciones, lo cual nos lleva a reflexionar sobre la manera de actuar y emprender en nuestros negocios, muchas gracias
Gracias Luis Miguel por tu comentario. Realmente creo que podemos lograr mucho más de lo que creemos, sólo empezando por creer que es posible.
Cada mañana se inicia o con la inercia de la costumbre por el trabajo … o con el enfoque de uno o varios logros en el trabajo de ese día…. en la primera situación las circunstancias nos gobernarán… en la segunda presentaremos acciones, nos desplegaremos, pensaremos y aplicaremos en busca de los logros fijados para ese día…. día a día … la voluntad sostiene …. el enfoque fija. Entrenarnos en esta forma de enfrentar la vida…. es una decisión diaria, … a cada hora,…. a cada minuto, ….
Qué buena reflexión Julio. Definitivamente es un enfoque de constancia. Mantener la actitud correcta no es cosa de un día, sino como dices, de cada día, cada hora y cada minuto. Y es muy cierto lo de la actitud que tomamos frente al trabajo, de inercia y hasta indiferencia, o de hacer que las cosas pasen. Estamos tan acostumbrados a la rutina, que no vamos más allá. Como un neurocientífico decía alguna vez: “El cerebro es una cosa maravillosa. Empieza a funcionar desde que nos levantamos, y no para hasta que llegamos a la oficina”. Saludos!
Estoy de acuerdo con lo que tú dices.
Felicitaciones.
Me alegra mucho Norberto, gracias por tu comentario.
David: Gracias por ese llamado de atención.. He compartido este video a toda nuestra fuerza de ventas, para que lo escuchen te tus palabras y reflexionen sobre todas las herramientas que colocamos a su disposicion para facilitar la forma de trabajar, para hacerla más eficiente, para ahorrar tiempo, pero muchas veces es difícil que algunos vendedores rompan los paradigmas que tienen sobre la forma de trabajar.
Muchas gracias Mauro y me alegra que sea útil para tu fuerza de ventas. Variedades Carol es un gran ejemplo a seguir… no en vano es caso de estudio en cada libro que escribo 🙂 Un abrazo!
Hola David, casi siempre leo los boletines, pero en este caso decidi ver video, porque me parecio un tema tan trascendente en nuestra accionar, que preferí escuchar y ver …!, y cuando termino el video lo primero que vino a mi mente fue GRACIAS, GRACIAS; no solo por el tema en si que tocas en este boletín sino también por haber decidido seguirte con todos los boletines, porque de no haber sido asi, este me lo hubiese perdido !, nuevamente David GRACIAS por compartir, Información y Dedicación con Pasion !.
Saludos
Gustavo
Muchas gracias Gustavo, muy inspiradoras y alentadoras tus palabras. Me emociona mucho ver que somos muchos los que compartimos esta pasión. Un abrazo y seguimos en contacto!
Hola David, me encantan y me apasionan los temas de marketing, muchas gracias por tu dedicación y costancia para mantenernos al día con tus contenidos .
Gracias por el comentario, saludos!
Gracias david! Veridico y verdadero.
Un gran saludo Ana!
Excelente comparto esta nota y me siento identificada! [email protected] la comparti en instagram!!
Gracias María por compartir. Un gran saludo!
Excelente reflexión, totalmente de acuerdo, no puedes considerarte un vendedor si no haces que las cosas sucedan, no conozco vendedor pasivo que genere buenos ingresos, pero si conozco a los proactivos que generan grandes ingresos. Felicidades!!! por tú página.
Un saludo desde México.
Así es Conrado, como bien lo dices, tenemos la capacidad de lograr muchas más cosas de las que a veces creemos. Un gran saludo!