Frutichips es un negocio que ve la luz comercial como una forma de aprovechamiento de excedentes de producción agrícola y que gracias a la habilidad del profesor Marco Antonio Agudelo para usar la información, que sus potenciales clientes le proporcionaron, apuntalado en su familia, logra llevar a cabo un proyecto único en su tipo. Este combina la capacidad de producción, la innovación en empaques ecológicos, biodegradables, con una apuesta dirigida al bienestar de los consumidores por medio de snacks saludables hechos de fruta deshidratada.
En este momento, Frutichips es la única empresa de su tipo en la región (Villavicencio, Meta) y su plan de trabajo al futuro es expandirse al resto del país, algo en lo que vienen trabajando de forma paciente y que nos cuenta uno de sus fundadores en esta entrevista:
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué es Frutichips?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Es una iniciativa familiar que nace hace dos años en Villavicencio, Meta y de lo que nos encargamos es de la deshidratación de frutas, como una alternativa saludable tipo snack para los consumidores. Lo hacemos básicamente porque, a ver, digamos, yo me cuido mucho en mi casa, como saludable, pero cuando estoy en la calle me toca comer lo que me ofrecen y más por los afanes de ahora, que uno trabaja, estudia y pues no nos digamos mentiras, en la calle le ofrecen a uno cosas poco saludables, mucha grasa, endulzantes, conservantes, y usted sabe que hasta antibióticos le ponen a la comida. Entonces nosotros deshidratamos la fruta y la ofrecemos para que el lugar de comerse una fritura se pueda alimentar con algo saludable.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Quiénes fundan Frutichips?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): En esencia es iniciativa familiar. Junto con mi esposa, Adriana Paola Corredor, porque pues ella fue la primer persona a la que tuve que convencer y decirle, mira acá hay posibilidad de negocio, por qué no compramos unas máquinas y ensayamos como para ver si esto va para algún lado. Afortunadamente ella accedió y pues en esto estamos. También está mi hijo Erik Daniel Agudelo, de 19 años, con el que más le metemos el hombro a esto.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Cuánto tiempo llevan trabajando formalmente?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): En ventas, un poco más de un año, pero nos gastamos otro tanto haciendo pruebas de producto, buscando el punto óptimo, dándole muestras a amigos, familiares, personas cercanas y recogiendo las opiniones, buscando críticas, mejor dicho viendo la cara del consumidor y de todo el que probaba el producto. Después de esto, nos decidimos salir al mercado.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Por qué frutas deshidratadas y no otro tipo de bocadillos?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Póngale cuidado: Una vez, estando en la finca de un hermano en Cubarral, yo le dije, Lucho, me quiero llevar unos mangos para la casa, él me dijo, pues venga nos llevamos la carretilla y nos fuimos a recoger unos mangos muy bonitos, pero que tenían una peca o un pequeño imperfecto… Él me decía esa vaina no se lleva, eso se bota y me contaba que realmente los excedentes de producción terminan perdiéndose porque resulta muy costoso comercializarlos. Si usted intenta venderlos o ponerlos en punto, le sale más alto el costo que lo que va a recibir de retorno. Entonces esas frutas, esos excedentes terminan siendo un problema porque el dueño de la cosecha tiene terminar pagándole a un encargado para que la entierre o esa fruta termina llena de moscas y no, eso termina siendo un problema. Vea eso es un problema generalizado en todo lo largo y ancho de Colombia y de muchos países agrícolas, se pierde mucho excedente de producción.
Entonces, lo primero que me puse fue a averiguar qué hacer y lo primero que se me ocurrió fueron las pulpas de fruta y vendamos pulpas, pero no, ese mercado ya estaba muy competido y no lo vi atractivo. Investigando me encontré con el proceso de deshidratación. Por eso terminamos haciendo esto, para darle la oportunidad a esos productos, y pequeños productores que tienen esos excedentes para que no se perdiera.
Carlos Ayala (Bien Pensado): Luego de este tiempo de trabajo ¿Cuál es el balance empresarial que pueden hacer, cómo les ha ido?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Pues hombre, eso empezó como proyecto C, cuando salimos al mercado, vimos que era un proyecto B, es algo que nos puede representar unos ingresos buenos, un futuro y ahora lo vemos como nuestro proyecto A, como nuestro plan de vida, porque el mercado nos ha respondido. El producto goza de muy buena reputación dentro de los consumidores y lo hemos ido fortaleciendo, entonces nosotros hemos visto que este es el plan del futuro, porque el consumidor ha respondido y finalmente él es que el mejor indicador.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Cuál fue ese negocio o señal que les permitió decidir que su proyecto era en indicado?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Pues uno empieza a vender con la gente que uno conoce, con los más cercanos… En esa época, mi esposa trabajaba en una clínica acá de la ciudad, entonces les armamos a las compañeras unos paquetes de forma artesanal, hicimos unas muestras con bolsas de sellar y una etiqueta nada del otro mundo. Pues la gente empezó a pedir, que me traiga tanto porque a mi mamá le gustó… La respuesta de público inicialmente fue lo que los llenó de alicientes, no fueron grandes negocios al inicio, fue la gente, con el paso del tiempo hemos conseguido aliados y tenemos ya distribución, pero esa primera reacción de la gente, mostrándose contenta, pidiendo más, fue lo que nos llenó de optimismo.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Cómo definen el mercado al que se van a dirigir, tienen estrategias?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Bueno, nosotros hemos hecho una segmentación de clientes que nos lleva a ver que nuestros principales clientes son mujeres que trabajan o estudian o cumplen ambos roles y además están interesadas en llevar un estilo de vida saludable. Este es un mercado que está en crecimiento, en los últimos siete años este segmento ha venido creciendo de forma consistente entre un 8% y un 11% donde también los hombres están entrando.
Entonces existe un mercado pero es un mercado que está creciendo y son más las personas que están interesadas por lo que hay que estar revisando ese tema constantemente.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué actividades de fidelización realizan ustedes con sus clientes?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Nosotros en este momento estamos actuando de forma firme acá en Villavicencio, con algunas entradas a Bogotá y al Casanare y la fidelización la logramos por medio de participación en ferias, eventos donde tenemos contacto directo con nuestros consumidores donde se repite la estrategia que usamos en redes sociales donde no solo les damos a conocer un producto sino que les contamos los beneficios de la comida saludable, les damos recetas para que los consumidores puedan desarrollar con nuestros productos y contarles porqué hacemos las cosas, cómo las hacemos y creamos un vínculo directo con el consumo y el producto que nosotros brindamos.
Vea hay cosas que uno le cuenta a los consumidores cambios del proyecto de trabajo, los procesos que hemos tenido. Antes teníamos un tipo de empaques resellables y ahora usamos empaques biodegradables hechos con bagazo de caña que es lo que sobra de la industria panelera y por dentro están hechos a base de pulpa de maíz. Esos empaques se degradan en 45 días al ser enterrados. Poder transmitir eso a nuestros clientes, exaltan nuestras cualidades de empresa, y eso nos logra mayor fidelización con nuestros consumidores.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué desafíos han tenido que enfrentar en el transcurso de este tiempo?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Pues bueno, hay dos cosas, yo soy docente de emprendimiento en una universidad a nivel nacional de la UNAD, entonces allí ese conocimiento me ha permitido usar la planeación estratégica, entonces todas las decisiones tomadas y basadas en la información nos ha permitido digamos que gozar de un avance sin mayores tropiezos. Sin embargo, sí hay un elemento que tenemos que terminar de sortear que es poder comprarles directamente a los productores, porque cuando identificamos el problema de los excedentes de producción, yo quisiera es comprarle directamente a ese campesino que no los sacan al mercado y ellos no lo hacen de forma autónoma, entonces hemos estado trabajando con el cluster horti-fruticula de la región que busca llegar directamente donde ellos. Porque si… Vea, si yo compro un camión lleno de 8 toneladas sería más sencillo el proceso, pero ahora mismo compramos media tonelada en variedad de fruta, entonces nos toca comprarle es a un distribuidor, a un intermediario. Ese es, digamos, es ese el escalón que queremos superar, que esa gente se organice para lograr una mejor compra.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué lecciones de aprendizaje debido a errores cometidos han cometido hasta el momento?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Sucede que uno está empezando con un proyecto uno se enamora como con los hijos, entonces a veces toma decisiones por pasión por amor en el sentido de que por ejemplo, nos decían: Hay tal evento y pum para allá nos íbamos, porque uno quiere difusión. Sin embargo, uno aprende que no todas las batallas tienen que ser peleadas para que las cosas salgan bien, digamos en ese afán de querer hacer difusión hemos hecho inversiones en situaciones que no eran las más adecuadas, eso sería lo que más ha marcado, pero siempre queda algo, contactos, o ventas.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué sigue para Frutichips?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): El siguiente paso es escalar a nivel nacional, salir de la localía. En este momento estamos trabajando con el Fondo Emprender y esperamos que este año ya salgamos aprobados con presupuesto y con eso poder cumplir requerimientos que se necesitan para espacios más grandes. Vamos a fortalecer nuestra planta de producción, queremos una planta un poco más amplia y meternos de cabeza en el mercado nacional.
Carlos Ayala (Bien Pensado): ¿Qué decirles a los emprendedores que están empezando un proyecto o una empresa desde su experiencia?
Marco Antonio Agudelo (Frutichips): Yo creo es muy importante hacer prototipos, en qué sentido: Si usted va a poner un negocio debe saber cuáles son los motivos que me llevan a ese punto. Es decir, en mi caso, mis amigos y conocidos me decían eso hágale que yo le compro, pero eso no es suficiente en el mundo de lo práctico, para que una empresa funcione. Entonces si usted puede hacer un prototipo de su producto con sus clientes para revisar si realmente funciona, eso es fundamental, porque ese ejercicio arroja una información basada en yo hago productos que la gente quiere, no lo que yo quiero para la gente, se basa en las necesidades de la gente y oriento lo que yo puedo ofrecer basado en esa necesidad.
Lecciones Frutichips
- Escalar proyectos empresariales según su viabilidad y categoría: A, B, C, etc.
- Si del cielo te caen frutas aprende a hacer lo que el estudio de mercado te indique. No solo limonada se hacen con los limones.
- Segmente su público objetivo revisando la totalidad del mercado aunque usted esté enfocado inicialmente solo en una parte.
- Recabar información para planear le evitará los tropiezos comunes y tomarse su tiempo en ello es lo más saludable para el futuro de su empresa.
- Recomendación Frutichips y que se aplica para todo en la vida, mucho más para el campo empresarial: “No todas las batallas tienen que ser peleadas para que las cosas salgan bien”.