Es popularmente aceptado que el cliente es quien tiene el poder en una negociación. Que quien tiene el dinero pone las condiciones. Que el disponer de múltiples opciones le permite escoger al mejor postor. El problema es que el mejor postor no siempre es el mejor proveedor.
Muchos compradores presionan tanto a los proveedores que se pierden de todos los desarrollos y contribuciones que podrían darles para optimizar costos, rentabilizar la operación y generar innovaciones. Más interesados en un descuento puntual, pierden de vista el verdadero potencial de crecimiento.
Los compradores pierden cuando por un amor de verano, renuncian a un aliado de largo plazo, cuando por no poner las cartas sobre la mesa, terminan perdiendo la partida. Los compradores pierden cuando no obtienen todo el conocimiento y compromiso que un proveedor experimentado podría entregarles. Ser cliente no es solo un derecho, es una responsabilidad.
Que tema tan interesante y reflexivo, a veces se comete el error de buscar al que primero de un buen descuento y tal cosa no garantiza que el producto o servicio sea de buena calidad, que haya cumplimiento en las entregas, que se resuelvan de forma eficaz las dudas o inquietudes frente al uso del producto o servicio, que el personal este bien capacidado para resolver inconvenientes, todo eso hay que tenerlo en cuenta, gracias por tan valiosa informacion
Así es Claudia, lo importante es hacérselo ver al cliente, saludos!
Si uno se sentara con el cliente a negociar ser su mejor postor y proveedor, la ganancia es mutua.
Muchas gracias.
Tal cual Carlos Julio, pero a veces ver la relación como una simple transacción no deja ver las posibilidades