Con frecuencia nos quejamos que los competidores pueden ser más eficientes porque tienen estructuras menos pesadas. Porque no cuentan con personas de investigación, porque no invierten en publicidad o porque son importadores sin costos locales de producción.
Esa es la realidad. El mercado no preferirá la compañía que invierte en una serie de cosas, si no le generan algún valor reconocible. Los clientes no preferirán productos locales frente a los importados sino les ofrecen mayores beneficios.
Si no está de acuerdo con lo que el mercado piensa de su competencia, si cree que la está sobre valorando, reposiciónela, comunique su diferencial; pero no se quede esperando que los clientes le compren por justicia y equidad. Usted es simplemente una opción más, depende de usted aceptarlo y avanzar.
El mercado no es justo. Los clientes prefieren las compañías que resuelvan mejor sus necesidades, esté usted de acuerdo o no.