Traducir la clásica tradición de escribir historias para el entorno empresarial y de liderazgo, fue la tarea realizada por Loïck Roche y John Sadowsky con “Las siete reglas del Storytelling”.
De forma práctica, este par de autores logran introducir al lector en el mundo de la narrativa de adaptación aplicando un principio fundamental de la tradición escrita y oral: Usar las emociones de las acciones y las acciones para generar emociones, delimitando con claridad la diferencia entre manipulación, exageración e interacción real con las audiencias, público o consumidores.
Este libro se convierte en una herramienta que puede ser usada para encaminar experiencias de producto o como derrotero para aprender a contar nuestra propia historia sin caer en los lugares comunes. Para ello, los autores recurren al planteamiento de siete herramientas bases que nosotros describimos de forma somera en este artículo:
La fuerza de las historias y las leyendas
Este libro comienza con una sesuda primer parte, muy bien referenciada donde se nos recuerda el poder las historias. Paseando por citas de Nietzsche, Sartre y Carl Jung, hace un repaso del poder que tienen los cuentos, las narraciones al interior de nuestras vidas como individuos debido a los arquetipos que se plantean en las mismas para la construcción de imaginarios que alimentan la historia universal.
De otro lado, indica cómo esas historias o narraciones logran, según el contexto, crear identidad o significado para quien las apropia, sea el caso de las organizaciones, que además les da un poder para la aceptación de sus miembros. Ya que estas narraciones cobran vida en experiencias que a su vez se transforman en valores.
Adicionalmente, los autores hacen un breve repaso de sus experiencias en el entrenamiento de líderes y centran su atención en describir cuáles son las mejores prácticas de liderazgo:
- La búsqueda de sentido
- La comprensión y el hecho de compartir la misión, los valores y la visión
- El sentido de pertenencia
Acto seguido se realiza una descripción de las características que debe tener un líder, y se centran en la capacidad que este debe esgrimir para contar historias por medio de la autenticidad y la capacidad de generar empatía entre los suyos.
Finalmente, esta introducción de cuatro capítulos termina con una descripción direccionada al liderazgo del significado de contar historias. En este apartado realiza una serie de advertencias y se sugieren pasos sobre aprendizajes interiorizados y beneficios que podrá lograr si aprende a contar una historia.
En primer lugar se hace una invitación para realizar un acto de autodescubrimiento, que a su vez es una reflexión sobre la utilización de las emociones enfocado a cómo contar una historia, defendiendo puntos de vista y encontrando su voz, logrando una combinación de razón, emoción y narración.
Luego de este introductorio, los autores los introducen, ahora sí nos sumergen en las siete reglas para contar historias y sus limitaciones:
Regla Nº 1: Involúcrese con su viaje interior
Ya lo habían explicado desde la perspectiva personal, ahora se proyecta con una función específica: la de contar una historia. Pues bien, los autores dejan claro que no es necesario tener un pasado extraordinario para ser extraordinario y se debe tener la capacidad para explotar cada una de las lecciones aprendidas para llevarlas a un nivel narrativo convincente. Todo esto debe ser delimitado por unas etapas:
- Desarrollar un escenario claro
- Reescribir sus experiencias
- Crear un viaje que sea verídico
Aclaran sin embargo que no hay fórmula mágica y que este proceso desembocará en otros procesos que a su vez le permitirán el progreso de sus historias.
Esta regla se centra en descubrir el yo del contador de historias para lograr un impacto sobre los demás, basadas en convicciones fuertes que logren puntos de identificación. Sobre este argumento sugieren que se trabajen los aspectos más fuertes de la vida del narrador recurriendo a sus orígenes de dónde podrá proyectar puntos de vista que pueden enseñar. Esta regla es un viaje interior para desentramar la historia o historias que podrá usar a lo largo de su vida y que irán evolucionando según la capacidad que tenga el narrador para ir más allá en exploración y capacidad de descubrimiento.
Regla Nº 2: Cree una historia auténtica
Los autores ya delimitaron el uso del viaje interior, del conocimiento de la historia personal y con esta regla delimitan los elementos que deben servir para que el narrador se transforme en un agente de cambio por medio de sus narraciones.
Recurriendo a imágenes tan poderosas como Margaret Thatcher y Martin Luther King recuerda cómo estos líderes usaban poderosas frases que contenían historias representativas (“I have a dream”) para presentar pilares universales de su propia historia.
Se indica que para lograr este tipo de imágenes mentales es necesario recurrir a la pasión, a imágenes poderosas para lograr recordación a largo plazo que a su vez serán pilar para crear historias únicas. También se sugiere el uso de la adaptación a cada contexto, esto es que las experiencias pueden ser relevantes para cada individuo según la capacidad de identificación que logre el lector o receptor de las mismas. Finalmente esta regla indica que las narraciones deben ser parte fundamental del desarrollo en las culturas corporativas.
Regla Nº 3: Involucre a quienes trabajan con usted
Se basa en una premisa clara y contundente: “La historia más importante no es la suya, sino la que se crea en el espíritu de quienes la escuchan”.
¿Pero cómo es esto si desde el inicio los autores han insistido hasta el cansancio que es necesario una construcción personal de narraciones para poder llevar a cabo historias que inspiren? Pues bien, de eso se trata el asunto, si usted logra, además, integrar las historias de sus acompañantes como parte fundamental de un todo está en el camino adecuado de lograr un recorrido de inspiración general. Esto se logra siguiendo estos pasos, sostiene el texto:
- Describa cada cosa como un compromiso compartido
- Defina un futuro atractivo que estimule la imaginación
- Señale objetivos superiores
- Defina roles extraordinarios para su historia así mismo lo sea
- Fomente formas de comunicación en la que otros puedan generar sus propias historias
- Use la apropiación de las historias para difundir formas de cultura empresarial
- Finalmente, si usted logra inspirar a los demás a que asuman papeles dentro de una narrativa constante y evolutiva, seguirán su proceso creando nuevas líneas para contar historias.
Regla Nº 4: Sea usted mismo
Suena fácil pero no lo es. Este libro recuerda constantemente la necesidad del autoconocimiento como el insumo principal para la creación de historias auténticas, duraderas y que logren afectar a organizaciones.
Entonces esta regla trata de la verosimilitud, la capacidad que tiene un narrador o líder de hacer como propias las historias.
“Si sus historias no son auténticas, y no las puede encarnar y vivir plenamente, tal vez sea mejor no contarlas”.
Esta regla hace énfasis en lo que se requiere para lograr contar historias creíbles:
- Atención a los detalles
- Práctica
- Repetición
A esto se le debe sumar la capacidad de modificar los puntos de vista o las versiones que pueda tener sobre una sola historia. Esto se logra, según dicen los autores con la autoexploración del “yo”. Todo esto lo que busca es que esa narraciones logren convicciones más profundas, de más largo aliento para definir misiones y visiones más grandes.
Consejo realmente práctico de esta regla: Escriba como habla.
Esto es que además de aprender sus historias, saberlas manejar, debe escribirlas de tal forma que constituyan una forma, un estilo que se identifique con su personalidad y la forma en la que desarrolla las anécdotas de la misma. Se sugiere por lo tanto, que haga un diario donde se detalle la concepción que se tiene de sí mismo y su proceso como líder o narrador.
Esto le permitirá:
- Elaborar una historia clara de su vida
- Legitimar sus acciones en el momento de describirlas
- Tener un documento que podrá ser usado.
Regla Nº 5: Proyecte sus ideas
Esto se logra, sostiene el texto, con la escritura concienzuda de las interpretaciones que usted le da a su propia vida y que transforma para dar a conocer a los demás.
Proyectar por medio de registros escritos le permitirá además imaginar más allá de lo que sus actos inmediatos puedan demostrar. Por lo tanto la representación, de esto se trata esta regla, de representar un deseo por medio de ideas que se pueden hacer tangibles y que den significado a la historia, una que puede servir de guía.
Sugiere que un líder que cuenta historia debe controlar de forma consiente las imágenes e impresiones que deja en las personas a las que se dirige, esto hace parte de la capacidad de proyección.
Esta regla combina las capacidades ya sugeridas a desarrollar y la épica, o sea la posibilidad de proyectar viajes a lugares que en primer momento parecen inimaginables, para luego transformarlos en sitios o situaciones posibles en un futuro cercano o lejano, contando siempre con la posibilidad del heroísmo. De los pequeños actos heroicos que constituyen las gestas individuales.
Regla Nº 6: Personalice sus historias
Aprender a expresarse en primera persona, de esto se trata esta regla. Esto puesto en el escenario, en la narrativa es la capacidad de hacer suyas emociones, sonrisas y sentimientos de orgullo de narrativas que no son directamente propias.
Se deben construir puntos de vista que logren identificación personal y a su vez permitan desarrollar un lenguaje propio. Esta sea tal vez una de las reglas más complejas de aplicar ya que requiere lectura a profundidad, estructura y práctica sin cesar.
Recuerda que: Ser humilde y al mismo tiempo hablar de manera personal es extremadamente eficaz.
Regla Nº 7: Simplifique siempre
Las historias simples, de esto trata esta regla. Esto no quiere decir que sean historias “simplonas”. Lo que se pretende es eficacia en el método para que la narración se auténtica, por lo tanto saber escoger qué historias serán usadas resultan fundamental.
“Su discurso debe ser ¡lo más directo posible! Siempre habrá tiempo para añadir detalles”.
Para esto usted debe centrarse en lo esencial y:
- Estar cómodo en cualquier contexto
- Sentirse más confiado en la fuerza de sus historias y en sus habilidades para utilizarlas.
- Ser auténtico en sus discursos, porque usted hablará desde el corazón
Dentro de esta escogencia que se hace usted debe lograr historias para cada audiencia. El proceso es una construcción de pequeñas y grandes narraciones que se alimentarán entre ellas, para lograr un catálogo de momentos según su audiencia.
Finalmente en esta regla se hacen recomendaciones sobre la importancia de la narración y la estructura que se escoge para llevarla a delante y la capacidad que se tiene para que conecte con la audiencia. Esto depende de la sumatoria delicada que se logra al combinar los elementos descritos.
Limitaciones y cuestiones éticas sobre “contar historias”
Un cierre necesario sobre las reglas dadas que indica las trampas que evitan un verdadero progreso en el arte de contar historias:
- La primera trampa es la autosatisfacción
- La segunda es la urgencia
- Llevar la narración muy lejos
- Hacer la historia demasiado larga
- Centrarse demasiado en uno mismo
- Definir mal las fronteras entre la autenticidad, la verdad, la exageración y la manipulación.
- No hacer bien la personalización
- Descuidar los detalles de las historias
- Fallar en la inclusión
- Fracasar en la encarnación
El cierre del libro es más que adecuado y no deja margen para entrar a interpretar:
“Las auténticas historias de vida son simplemente la mejor fuente de liderazgo. Por ello, para inspirar y transformar de manera permanente a sus equipos debe reexaminar y contar sus historias autobiográficas constantemente”.
Excelente resumen, contar tu historia tiene un poder con los clientes ya que humaniza tu proyecto y genera empatia, saludos.