Hace poco estuve almorzando en Salvador Grill Bar, un restaurante en Buenos Aires cuyo slogan me llamo la atención: Grill Bar en tu horario.
En una ciudad donde la costumbre de los restaurante locales es cerrar entre almuerzo y cena, mantenerse abierto todo el día es algo fuera de lo común. Tener un horario diferente capitaliza los clientes que los demás no atienden.
Y esto es una forma de diferenciación, no tiene que ver con el sabor de la comida, no tiene que ver con la experiencia, no tiene que ver con su menú y no tiene que ver con su ubicación. Tiene que ver con el horario, algo que hacen saber a los clientes.
El diferencial no está en el producto, una buena carne es algo que se da por sentado (en Buenos Aires se come buena carne en muchas partes, por lo que nos algo que diferencie), el diferencial está en la disponibilidad y el horario de atención.
Muy interesante cómo un restaurante se atreve a definir un diferencial y a comunicarlo, haciendo de su eslogan el beneficio de abrir cuando los demás están cerrados.
Sólo un par de recomendaciones: 1) El eslogan puede ser más directo en relación con el beneficio, algo como “Grill Bar siempre abierto” (a veces los creativos por querer decir las cosas bonitas pierden la contundencia y claridad del mensaje), y 2) La página de Facebook no reemplaza la página web.