Recuerdo por allá en los años 80’s e incluso en los 90’s que las medias veladas eran un accesorio habitual para las mujeres. Hacían parte imprescindible del atuendo. Incluso el riesgo de que se rompieran era un fantasma que acechaba permanentemente.
Con el tiempo dejaron de utilizarse, o por lo menos, no con la intensidad que se hacía hace algunos años.
Y con este desafío en mente esta empresa reinventa el uso del producto. Las medias Tall promueven esta versión de las medias veladas, pero ahora invisibles y adicionalmente dan un efecto de bronceado.
Nunca pensé que las medias veladas llegarían a competir directamente con los bronceadores; con la ventaja que no se requiere sol, ni tiempo extra y no es dañino para la piel.
Un buen concepto que busca incrementar la demanda del producto a través de nuevos usos.
Fotografía tomada en una farmacia de Bogotá: