Uno de los mayores obstáculos para que las ideas se lleven a cabo, es el riesgo implícito del… “¿Y si no funciona?”. Implementar cualquier estrategia de diferenciación conlleva esfuerzos y recursos, que a menos que se perciban como un camino seguro, difícilmente pasarán de la etapa de concepción.
Pruebas piloto
Y aunque no hay ningún camino cien por ciento seguro, sí hay formas de mitigar el riesgo, y es haciendo pruebas piloto. Cinco alternativas para empezar a avanzar y evaluar el potencial alcance de la estrategia.
1) Limite una zona – Implemente la estrategia geográficamente en una zona de influencia controlable.
2) Seleccione algunos clientes – Haga el piloto con uno o dos clientes de bajo riesgo, implementando el proceso paso a paso.
3) Empiece con una línea – No pretenda cambiar toda la organización de un día para otro. Seleccione una línea o unidad de negocio y empiece por ahí.
4) Lance ediciones especiales – Tienen la ventaja de ser temporales. Si genera buenos resultados se puede convertir en un producto o servicio habitual.
5) Cree una marca nueva – Empaquete o desarrolle la propuesta de manera diferente. Si no funciona, no afectará la marca principal.
Aplica para muchas iniciativas
Las pruebas piloto no solo son una herramienta para implementar nuevas estrategias a pequeña escala. Aplican también para probar en campo cualquier iniciativa, desde programas de desarrollo de distribuidores y promociones de ventas, hasta campañas de comunicación y argumentos comerciales. Todo puede probarse, y qué mejor que en el mismo mercado.
MUY BUENA TU SUGERENCIA, COMENZAR CON PRUEBAS PILOTO PARA NUEVOS PRODUCTOS, GRACIAS
Un gran saludo Gildardo!
ES MUY IMPORTANTE, TENER EL RIESGO DE TODO CAMBIO LO MEJOR CONTROLABLE POSIBLE, LOS 5 PASOS SON MUY VERDADEROS
Así es, saludos Daniel!