Ventas es vanidad, utilidad es sanidad, caja es realidad

Ventas es vanidad Utilidad sanidad Caja realidad

Esta expresión popular es una de las premisas del libro Negocios Inmortales: Ventas es vanidad, utilidad es sanidad, caja es realidad. El objetivo de un negocio no es vender, es lograr rentabilidad para poder sostenerse en el tiempo y crecer. El resto de variables (ventas, experiencia de cliente, desarrollo de productos, etc.), son causas que llevan a esa consecuencia: la prosperidad económica del negocio.

De nada sirve vender si no ganamos dinero y, mucho menos, si ese dinero no se refleja en disponibilidad de efectivo. Las crisis nos demuestran de una manera dramática y dura que al final del día la salud financiera del negocio es la única realidad con la que contamos.

Ventas es vanidad

Es una gran tentación medir el éxito de la compañía por el nivel de ventas . Es la principal variable con la que se evalúa socialmente, probablemente porque es la más visible . Es la que aparece en los listados de las industrias y es lo que enorgullece a los dueños . Sin embargo, de nada sirve tener un alto nivel de ventas si la compañía no gana dinero. Obvio pero escaso.

Si bien la rentabilidad no puede existir si no hay ventas, lo que determina la sanidad y prosperidad de una compañía es la capacidad sostenible de generar utilidad.

Utilidad es sanidad

Cuando pensamos en que las ventas que hacemos deben ser rentables, esto nos lleva a una serie de decisiones comerciales en el día a día de nuestro negocio . Desde con qué clientes trabajar y qué condiciones ofrecer, hasta a través de qué canales comercializar y qué segmentos de mercado atender.

Son sus decisiones comerciales las que determinarán la rentabilidad de la empresa. Las tres variables que debe controlar para vender de manera rentable son: precio de venta, descuentos y concesiones, así como la mezcla de productos.

Caja es realidad

A menos que se vea reflejada en la cuenta bancaria, la rentabilidad es solo una ilusión en el estado de resultados . Una venta rentable se tiene que transformar en dinero disponible para mantener el negocio operando, cumplir con las obligaciones e invertir en el crecimiento .

Si bien existen múltiples estrategias para mejorar la disponibilidad de efectivo (pagar más tarde, optimizar la deuda, controlar los costos), hay una inherente y fuertemente ligada a la gestión comercial: qué tan rápido le pagan sus clientes .

Conozca más de este tema en el libro Negocios Inmortales.