El cliente no busca perfección, busca transparencia

El cliente no busca perfección, busca transparencia

Nos han enseñado a vender la perfección, pero la perfección no vende. La transparencia vende. Transparencia es brindar a las personas toda la información necesaria para que se sientan seguros al tomar una decisión. Se trata de posicionar su solución como la mejor alternativa posible para lo que el cliente desea lograr y no como la solución perfecta. Ninguna solución es 100% perfecta. Y con esto no me refiero a que no funcione, sino a que siempre habrá algunos aspectos que no encajan completamente, sin que esto represente un riesgo en el desempeño total de la solución.

Es como en una relación de pareja. Es muy poco probable que dos personas coincidan en todos y cada uno de los aspectos de personalidad y comportamiento. Cada uno tiene sus gustos, hábitos, preferencias e historia de vida, lo que no implica que no se complementen y se lleven bien. Igualmente, lo que estamos buscando es el mejor encaje posible en la relación cliente-proveedor. Algunos proveedores ofrecerán soluciones más robustas en unos aspectos que en otros. Lo fundamental es que aquellas cosas que son críticas para el cliente sean las fortalezas y aspectos dominantes que usted aporta. Siendo así, lo importante es que en lo que su solución “se quede corta”, no sea de vida o muerte para el éxito del cliente. Incluso pueden llegar a ser cosas innecesarias.

La mayoría de las veces, las empresas y los vendedores presentan sus productos y servicios como si fueran perfectos. Sin embargo, cuando hacemos eso, ralentizamos el proceso de ventas porque ahora estamos obligando a nuestros clientes a descubrir por sí mismos por qué no somos perfectos. Para eso están preparados y es lo que han hecho por años, fruto de la limitada apertura de los vendedores.

El cliente no quiere sorpresas; quiere saber a qué atenerse para tomar una decisión. No quiere que le digan a todo que sí, solo quiere estar seguro que usted cumple lo que promete. Quiere evitar la incertidumbre para poder proceder. Quiere ver las cartas sobre la mesa (al igual que usted).

¿Cómo cree que lo percibiría un cliente si le pone de manifiesto las limitaciones de su solución?, ¿qué pensaría de sus vulnerabilidades como proveedor?, ¿qué pasaría si enuncia abiertamente las bondades de su competencia?, ¿cómo reaccionaría a su honestidad inesperada?

Le voy a dar la respuesta: generaría confianza de manera instantánea.