No presionar la venta es un apreciado diferencial

No presionar la venta es un diferencial

Muchos clientes huyen de los vendedores por su actitud invasiva y por querer forzar una venta a toda a costa. Desde las llamadas a deshoras hasta el acoso en puntos de venta, estamos agotados de la actitud obsoleta de presionar la venta. Estas personas hacen daño a la profesión y han obligado a muchos clientes a abstenerse e incluso a huir del apoyo o asesoría de un vendedor.

¿Le puedo ayudar en algo?

Cada vez que entra a un negocio y le preguntan: “¿Le puedo ayudar en algo?”; la respuesta automática e instintiva para preservación de la especie es: “No gracias, estoy mirando”. ¿La razón? Muchos vendedores entorpecen el proceso con su posición subjetiva, más enfocada en vender que en ayudar. Velando más por sus propios intereses que por los del cliente. No necesitamos más de estos vendedores.

Esta resistencia a los vendedores es tan evidente, que un par de compañías han utilizado el respeto de sus asesores como un argumento de diferenciación; que bajo el anterior contexto, es algo maravilloso y deseado.

Consultores hipotecarios con salario fijo

American Financing es un banco hipotecario, el cual utiliza el que “Nuestros consultores hipotecarios tienen salarios de base”, como uno de sus argumentos de venta. Esto implica que estas personas no dependen de una comisión para vivir; y por ende, no tienen necesidad de venderle o presionarlo por una compra para garantizar su ingreso. En este caso, el modelo de compensación de los vendedores se convierte en un argumento atractivo para los clientes.

Almacén de muebles con asesores respetuosos

American Furniture Warehouse es una bodega de muebles que utiliza la cordialidad de sus asesores como una razón para que los visite. En su comunicación ridiculizan una venta de colchones, donde un vendedor desesperante e incisivo, agobia a una cliente demostrando que lo único que le interesa es vender a toda costa. Así estamos de agotados de estos personajes, que se convierten cómicos referentes.

No presionar la venta es una virtud

Por eso, reconocer esta aversión y por el contrario ser respetuoso y genuinamente colaborador, es un diferencial altamente apreciado que los clientes están pidiendo a gritos. Y si cree que ser amable y no presionar una venta le afectará los resultados, no se preocupe, la mejor forma de atraer clientes es no necesitarlos.