Polinización cruzada

Polinización cruzada empresarial

Polinización cruzada empresarial

Una de mis grandes pasiones es identificar buenas prácticas en toda clase de industrias. Desde un vendedor de frutas en la calle hasta una gran multinacional, siempre encuentro ideas inspiradoras que se pueden adoptar en otra circunstancia.  Han sido cientos de ejemplos de toda suerte de industrias; desde educación hasta salud, pasando por tecnología y servicios financieros; todos los días encuentro pequeños pero poderosos mensajes de aquellos que lo están intentando.

La disrupción viene de afuera

Los competidores que han transformado industrias completas han venido de afuera, usualmente apalancados en plataformas tecnológicas. Airbnb transformó la industria hotelera, Netflix la forma de consumir contenido, Google la industria publicitaria y GoPro la forma de documentar las actividades al aire libre. Las mayores amenazas no vienen del mismo sector, sino de industrias adyacentes que empiezan a resolver lo mismo que usted, pero de manera diferente. Marriott con su programa Meetings Imagined compite con las agencias organizadoras de eventos, al integrarse cubriendo todas las necesidades de los clientes, desde la concepción de la idea de una convención o reunión corporativa, hasta su ejecución.

El enfocarse solamente en los competidores directos, evita vislumbrar tendencias más grandes y cambios en el mercado. Marcas tradicionales han desaparecido a causa de nuevas tendencias y desafiantes jugadores. Las empresas tradicionales no los vieron venir, por estar mirando hacia el lado equivocado. Enfocan toda su atención en los competidores directos, sin percatarse de que hay unos más peligrosos: los sustitutos. Aquellos que resuelven la misma necesidad de manera más eficiente.

Aprender de los demás acelera el proceso

Pepe Mujica
Lecciones de Pepe Mujica

No tiene que reinventar la rueda, sólo debe adaptarla y perfeccionarla. Como las palabras que alguna vez me dijo Pepe Mujica, refiriéndose al tema: “¿Quiere cambiar algo?, viaje. Ya alguien lo resolvió en alguna parte del mundo”. Al hablarme de los avances en países como Noruega, del desarrollo tecnológico de China o de lo que hay que aprenderle a Turquía, era enfático en la importancia de mirar más allá de las propias fronteras. Las fronteras no sólo se refieren a los países; sino a las industrias, a los sectores, a las costumbres y el tradicionalismo. Nos acostumbramos a ver las cosas de una manera, sin percatarnos que hay múltiples caminos por recorrer que podrían guardar la respuesta a muchas de nuestras preguntas. De eso se trata la polinización cruzada, de construir sobre el conocimiento colectivo, de traspasar las fronteras geográficas y de la propia industria para reinventarse y redefinir la forma como hace las cosas. Hay que salir del ostracismo sectorial.

Sin embargo, para aprender de los demás se requiere humildad. Estar dispuesto a aceptar que hay otras empresas que tienen cosas para enseñarnos. Es tener la voluntad y disposición de aprender, algo que no abunda en muchas organizaciones que consideran que su manera es la única manera de hacer las cosas. Con frecuencia el ego corporativo nubla la razón y evita ver lo evidente.

un clasico de la miopia corporativa
Un clásico de la miopía corporativa 

Lecciones que podría aplicar de otras industrias

Cuando está buscando mejores formas de hacer las cosas, es normal mirar hacia los competidores. Y si bien puede aprender mucho observando aquellos que hacen cosas similares, el mundo de los negocios es mucho más amplio y una fuente inagotable de ideas.

Aprenda de los mejores en cada cosa que necesita mejorar. Si realmente quiere innovar en su sector, difícilmente los colegas tendrán la respuesta. Identifique aquellas compañías que han perfeccionado procesos que usted necesita perfeccionar, aquellas que han superado grandes adversidades. Aquellas que incluso han luchado estoicamente frente a la extinción. Aprenda de quienes ya pasaron por lo que usted está pasando.

Starbucks empezó a poner el nombre del cliente en sus vasos con una carita feliz y ahora lo hacen las heladerías y otro tipo de negocios que atienden público. Hace años algún restaurante empezó con la costumbre donde los meseros rodean al comensal para cantarle su cumpleaños, y ahora es una práctica popularizada. Las ideas están en todas partes.

De los hospitales aprenderá como minimizar los riesgos al utilizar su estricto proceso de verificación antes de cualquier procedimiento. De los constructores aprenderá a diseñar alianzas para financiar proyectos de gran envergadura. De las franquicias aprenderá cómo estandarizar procesos para generar la misma experiencia y ofrecer el mismo producto, independiente de dónde se encuentre o quién la ejecute. De las empresas de venta directa aprenderá sus técnicas de capacitación, que convierten empresarios independientes en evangelistas. De la industria hotelera aprenderá cómo prepararse para cualquier eventualidad de un cliente, 24/7. De consumo masivo aprenderá a hacer distribución intensiva. De las empresas de tecnología aprenderá a convivir con la obsolescencia. De las petroleras aprenderá como reestructurar el negocio para adaptarse a desplomes de precios. De las empresas de infraestructura aprenderá cómo (intentar) negociar con el Estado. De los abogados aprenderá a prestar atención a la letra pequeña y a dejar todo por escrito. De la ciencia aprenderá la virtud de la persistencia, a sobreponerse a la frustración y a trabajar con recursos limitados por un fin superior.

Todos tenemos algo que aprender. Todos tenemos algo que enseñar.

Para pensar fuera de la caja, hay mirar fuera de la caja

Muchas empresas demandan “Pensar fuera de la caja”, pero en la práctica siguen haciendo las mismas cosas con otro nombre. Pensar fuera de la caja no es un proceso natural e involuntario; es un proceso deliberado de buscar al mejor en lo que necesita resolver. Por eso, el primer paso para pensar fuera de la caja, es mirar fuera de la caja.

Los ejemplos están en todas partes. Piense en sus marcas favoritas y en los negocios que admira. ¿Qué hacen diferente para ganarse su lealtad?, ¿es el trato y la experiencia en el servicio?, ¿el hecho de que lo llamen por su nombre y conozcan algo de usted?. ¿Es el único lugar que siempre tiene inventario del producto que necesita?, ¿son los pequeños detalles que enamoran? Entender lo que hacen los negocios exitosos, independiente de la industria, expande la visión y abre infinitas posibilidades.

Frente al próximo desafío, pregúntese, ¿Qué industria o compañía ya se enfrentó y lo superó exitosamente? Estudie su caso, entrevístese con alguno de sus protagonistas y aprenda con humildad. La experiencia colectiva tiene mucho por enseñarle. Observe y conecte los puntos.