Piense en todas las expectativas que tiene puestas en su negocio para este año y en todos los desafíos que va a enfrentar. Es abrumador. Hay tantos frentes y tantas novedades que es difícil mantener el rumbo y centrarse en las cosas que realmente importan.
Cuando se trata de construir un negocio exitoso y dedicar el escaso tiempo a las cosas que generan valor, pocas son tan efectivas y tienen tanto impacto como estas tres.
La falta de ideas es tan peligrosa como el exceso de ellas. Demasiada información y alternativas inmoviliza. Hay tantos posibles caminos que tendemos a hacer de todo un poco sin enfocarnos en las cosas de fondo.
Si pudiera escuchar a su negocio, estas son las tres cosas que le pediría a gritos:
1. Busque un punto de diferenciación
La principal enfermedad de los negocios es la falta de diferenciación. Ofrecer lo mismo que los demás pero con otro nombre no resuelve el problema. La gente no necesita una peluquería más, una veterinaria más, un diseñador web más, un consultor más o un odontólogo más. La gente no necesita más negocios, necesita negocios diferentes, negocios que resuelvan algo mejor que la competencia, que brinden mejores alternativas y que desafíen la predecible inercia de siempre. (Como inspiración, vea estos 55 ejemplos de diferenciación).
No basta con tener un buen producto o servicio. Ya hay demasiadas opciones. El punto es ¿cómo está resolviendo algo mejor de lo que ya existe?, ¿Por qué habría un cliente potencial de tomarse el trabajo y el riesgo de cambiar lo que ya conoce?.
¿Quiere dejar de competir en precio? Encuentre una forma de diferenciar su negocio que su mercado desee y valore, comuníquelo consistentemente y verá su negocio crecer. Sálgase del montón y empiece a disfrutar los beneficios de enfocarse en nichos de mercado con necesidades específicas.
2. Enfóquese en su cliente objetivo ideal
No todos son clientes potenciales. Pocas cosas afectan tanto a un negocio y su desarrollo como perseguir al cliente equivocado y tratar de venderle a todo el mundo. Desgasta, agota, frustra y es una pérdida de tiempo. No. Todos. Son. Clientes. Potenciales.
La inevitable consecuencia de pretender ser todo para todos es convertirse en nada para nadie. Una oferta indiferenciada que busca satisfacer superficialmente cualquier tipo de cliente, al final termina compitiendo con empresas mejor preparadas y especializadas en las soluciones por las cuales los clientes están dispuestos a pagar más. No todos los clientes quieren precio, quieren mejores productos.
Hágale un favor a su negocio y no trate de resolverle todo a todo el mundo. Para quien no aprecia sus beneficios y esmerados valores agregados, cualquier precio será caro.
La mejor forma para descubrir su cliente ideal y dejar de apuntarle a todo lo que se mueva es pensar en aquellos que lo hacen exclamar… “Si tuviera 10 clientes más como este, ¡la vida sería maravillosa!”.
3. Fortalezca su presencia online
Su negocio necesita visibilidad, su negocio necesita aparecer en las búsquedas de Google, su negocio necesita comunicarse regularmente con clientes potenciales, su negocio necesita venderle una y otra vez a los clientes actuales, su negocio necesita crear grupos de fieles adeptos que creen una base de negocios estable, su negocio necesita estar online.
Ningún negocio puede darse el lujo de marginarse de internet. Crear una estrategia digital es la forma más eficiente de alcanzar un mayor número de clientes potenciales y generarles la confianza necesaria para que le compren. Es una plataforma para atraer, seducir y conquistar. No es suficiente para un negocio depender de los referidos o de los clientes que pasan por el frente del negocio, internet es un medio masivo que le permite encontrar ese cliente ideal donde sea que se encuentre, al otro lado de la ciudad o al otro lado del mundo.