“Si un cliente no percibe diferencia, decidirá por precio”, reza la esencia de Bueno, Bonito y Carito. Y esta premisa es mucho más evidente en los commodities.
¿Qué es un commodity?
En términos sencillos, un commodity es todo producto o servicio que:
- Es fácilmente sustituible (por otro con similares características y desempeño).
- Se encuentra en abundancia (hay muchas opciones para escoger).
- El precio es determinado por el mercado (sobre el que tiene poco o ningún control).
Bajo estas condiciones, salvo muy raras excepciones, todos somos commodities. Como comercializadores de productos o servicios de terceros (farmacias, ferreterías, agentes de seguros), como profesionales aplicando a un puesto (ingenieros, abogados, diseñadores), como prestadores de servicios (banca, consultoría, medios de comunicación), entre muchos otros.
Sin embargo, ser commodity no es sentencia de muerte. No estamos relegados a un futuro incierto y oscuro que no controlamos. Es posible diferenciarnos.
Diferenciarse: crear una categoría de uno.
3 pasos para diferenciar un commodity
Para alejarse de aquellos competidores que pretenden quitarle clientes bajo la milenaria premisa de que son “lo mismo pero más barato”, siga estos tres pasos:
Paso 1: No se considere un commodity
En otras palabras, quítese de la cabeza la idea de que es un commodity y de que está condenado a competir por precio. El primer paso para cualquier cosa en la vida es saber que es posible y estar convencido de que hay caminos por empezar a recorrer para cambiar la realidad.
Es la mentalidad. Crea en lo que vende y su cliente creerá en lo que compra. Si en lo profundo de su ser siente que el cliente no tiene ninguna razón para preferirlo en lugar de su competencia, ha perdido la batalla sin siquiera darla.
Y no es un tema de simple motivación. Es un tema de entender con hechos y datos qué puede resolver mejor que los demás, pero sobre todo, creérselo. Nada está escrito en piedra. Entienda que los commodities no son los mercados en los cuales está “condenado” a competir, sino la actitud y falta de acciones de las compañías que compiten en ellos. No somos víctimas, somos protagonistas.
Paso 2: Saque el producto de la ecuación
Si vende lo mismo que su competencia, la diferencia no está en lo que vende sino en cómo lo vende. No está en el producto (es igual, comparable, sustituible y resuelve lo mismo), sino en los periféricos.
Esto no implica que no puedan haber algunas diferencias; sin embargo, deberán ser muy relevantes y distantes de la competencia para que los clientes realmente las consideren un diferencial válido para comprarle (lo cual generalmente no es el caso).
Sacar el producto de la ecuación lo obliga a buscar otros argumentos de diferenciación, más allá de las evidentes funcionalidades y características de su solución (que también tienen sus competidores). Olvidar (temporalmente) el producto implica preguntarse, ¿qué puede resolver distinto?, ¿qué otras cosas puede capitalizar que sean importantes para su cliente? Piense en los periféricos.
Paso 3: Potencie los periféricos
Nos referimos a periféricos como todos los aspectos que rodean el producto y que generan, en alguna medida, valor para los clientes. Lo más importante es que son argumentos distintos al producto.
Algunos periféricos pueden ser:
- Cumplimiento de tiempos de entrega: respáldelo con cifras de cumplimiento histórico.
- Experiencia específica: no en número de años sino de veces que ha sorteado una situación en particular.
- Disponibilidad de inventario: especialmente para referencias críticas en tiempos de escasez.
- Apoyo de otras áreas: ponga las áreas de apoyo der su negocio al servicio del cliente.
- Generación de demanda: le ayuda a los clientes a rotar el producto.
- Mayor seguridad: desde mantenimiento de equipos y sustancias hasta protección de información.
- Rápida asistencia técnica: tiempo de respuesta para solucionar eventualidad de un cliente.
- Certificaciones: da tranquilidad de que cumple estrictos procesos.
- Impacto social: responsabilidad con la comunidad con la cual interactúa.
- Asesores altamente entrenados: para brindar un acompañamiento más profesional.
- Procesos de desarrollo: ayuda al cliente a generar innovaciones en el mercado.
- Respeto por los proveedores: garantiza un abastecimiento más estable.
- Responsabilidad ambiental: insumos producidos responsablemente.
- Alianzas estratégicas: su propio ecosistema de aliados al servicio del cliente.
Recurso complementario: 50 formas de diferenciar su negocio
No es el producto, es lo que acompaña el producto
Hable con sus clientes e identifique qué aspectos son relevantes para ellos, cuáles son los mayores riesgos que corren con sus proveedores y qué desafíos enfrentan en los que usted pudiera generar valor.
Cuando los productos o servicios en una categoría están muy estandarizados, las estrategias de mejora y crecimiento de los clientes no vienen del producto mismo sino de la dinámica que rodea el producto: cadena de abastecimiento, servicio o innovación y desarrollo, entre otras iniciativas.
Muchas gracias por tanta enseñanza. Muy importante quitarnos de la cabeza que el precio es lo más importante. Tenemos la creencia que lo barato es lo que más se vende y si mi producto tiene un precio alto, a la vista del cliente, debo hacerle ver que el valor que va a recibir es mucho más que el precio que el va a pagar por mi producto.
Así es Oscar, nada es caro o barato, todo depende de la percepción y de lo que el cliente entienda que recibe a cambio, tangible o intangible. Saludos
Excelente artículo. Al fin alguien lo dijo de una manera más que clara!! Gracias!!!
Me alegra mucho Alvaro, un gran saludo!
Completamente de acuerdo contigo, mi estimado David.
Si quieres tener éxito en tus ventas, primero tienes que investigar tu probable cliente para saber ” qué le duele ” y cómo ” mi remedio ” puede aliviar y curar sus ” dolencias “.
Y empezar por hacer valer tus ” diferenciales “.
Es la forma de empezar a asegurar tu éxito.
De nuevo, gracias David por compartir tus conocimientos.
Todos tus artículos son excelentes y motivadores.
Muchos éxitos y un afectuoso saludo.
Así es Sahyro, hay que hacer valer los diferenciales y demostrar por qué costamos lo que costamos. Un gran saludo!
Excelente artículo muy interesante, es importante hacer de nuestro producto o servicio algo único que se destaca sobre lo demás ofrecido en el mercado
Tal cual
Que más COMODITY que el alimento para mascotas. Pero gracias a estos artículos he descubierto diferenciales tanto en el producto que justifican precios más altos, como el servicio y la asesoría con que lo acompañamos para que el cliente nos prefiera frente a buscar sustitutos en grandes superficies o almacenes “especializados”
Me alegra Carlos que estés evaluando alternativas para diferenciarte. Saludos