No importa qué tan exigente sea el trabajo, siempre hay un propósito superior que nos inspira. El trabajo es un medio, no un fin. Es una forma de servir a los demás al tiempo que cumplimos nuestra misión, cualquiera que ella sea.
Hace poco conocí una familia de limpia vidrios en un semáforo. Para la inmensa mayoría, los limpia vidrios incomodan, pues le van echando agua al parabrisas sin siquiera preguntarle, con una mirada malhumorada y pidiendo dinero. Sin embargo Isabelita, Gustavo y Jonathan se han ganado el aprecio de los conductores, quienes los saludan afectuosamente y les piden que les limpie el vidrio.
Al utilizar sus camisetas que dicen “Déjame servirte” y poniendo su nombre atrás acompañado de “Limpia vidrios”, es su actitud y amabilidad lo que hace toda la diferencia. Con un pasado difícil sumergido en la droga, hoy en día tienen a su hija estudiando en la universidad y vislumbran un futuro mucho más promisorio.
Esta es gente con #ActitudYellow. Estos son los héroes anónimos que nos demuestran al resto de los mortales que siempre es posible.
Este es el video de esta maravillosa experiencia:
EXCELENTE…………Valor Agragado…..
Total, esa es la actitud!
Una historia que inspira. Gracias!
Saludos desde Guatemala.
Un gran saludo Abner!
Gracias por compartir este tipo de historias. Necesitamos mas de esto.
Saludos.
Me alegra Antonio, gracias por el comentario!
Hace casi 45 años yo le dije a un muchacho que pedía limosna en los carro que me limpiara el vidrio y le pagaba pero que a mi no me gusta regalar, pero me encanta pagar por un servicio, que si me limpiaba el vidrio le pagaba y lo limpio con la manga de su saco, y por su habilidad y disposición le pague 5.000 cinco mil pesos en ese tiempo es como 50.000 hoy , sigue esperándome en la misma esquina y al dia siguiente ya tenía limpiando vidrios y por su voluntad le pague de nuevo 5.000 y asi siguio este joven, hace tres años me subí a un taxi y me reconocio despues de casi 40 años y me dio las gracias hoy tiene 3 taxis, A LA GENTE NO HAY QUE REGALARLE UN PEZ, HAY QUE ENSEÑARLE A PESCAR, NO DE LIMOSNA, PAGUE POR UN TRABAJO, Y ASÍ TENDREMOS UNA FAMILIA COMO LA QUE TU MUESTRAS, FELICITACIONES.,
Qué historia tan maravillosa Gildardo. Sin duda un gran ejemplo de superación y voluntad. Muchas gracias por compartirla!
Me encantó está entrevista..,. Felicitaciones
Súper chévere, no? La actitud de estas personas es increíble. Saludos Ana Teresa!
Maravilloso ejemplo de la dignidad de las personas. El trabajo les dará sus frutos
Seguro que ven su sueño cumplido.
Gracias por compartirlo.
Así es, saludos!